BARCELONA- «El físico no importa»; «la belleza real está en
el interior»; «la moda es la manada, lo realmente interesante es hacer lo que a
uno le da la gana»; etc. Son muchos los mensajes que invitan a aceptarse y a
quererse tal y como uno es. Pero, hasta qué punto estos comentarios calan en la
sociedad. Es más, ¿admite la sociedad realmente la diferencia? Los datos y las
cifras parecen indicar los contrario cuando, por ejemplo, el número de jóvenes
que sufren anorexia o bulimia no desciende. Peor aún, cuando cada vez más
personas, que superada la adolescencia, desarrolla algún trastorno alimenticio.
Según la Asociación contra la Anorexia y la Bulimia (ACAB),
unas 26.000 chicas padecen este tipo de trastornos, lo que supone el 6 por
ciento de la población femenina joven. Otros 2.000 chicos han desarrollado
también alguna de estas enfermedades. Los trastornos de conducta alimentaria
suponen la tercera enfermedad crónica en la población de entre 15 y 29 años. Se
calcula que el 11,5 por ciento de las jóvenes tienen un riesgo elevado de
padecerla.
Además, «si inicialmente se hablaba de un problema propio de
la adolescencia, en los últimos años se ha extendido a la población joven y
adulta», señala la ACAB. En este sentido, la entidad apunta que el 60 por
ciento de las consultas sobre este tipo de trastornos que recibe son de
personas de más de 24 años.
El origen de esta disfunción es multifactorial. Puede ser
biológico, psicológico o sociocultural, e, incluso puede deberse a una
combinación de éstos. Además, la enfermedad no suele venir sola. Depresión,
ansiedad o trastornos de la personalidad son algunas de las patologías que se
le asocian. Todo ello implica que el abordaje del trastorno debe abarcar
diferentes aspectos que incluyen el sanitario, le psicosocial, así como la
concienciación y prevención desde los diferentes estamentos con autoridad, ya
sea la Administración, la familia o un docente, por ejemplo.
Con el objetivo de aportar su granito de arena y de dar
visibilidad a la problemática la ACAB ha lanzado un nueva campaña. Principal
objetivo es confrontar a la juventud con esa realidad por eso, como explica la
entidad «la campaña busca crear sorpresa y curiosidad». Se trata de que el
mensaje, esta vez sí pase. Así, en todas los centros adheridos de la Red
Catalana de Universidades Saludables y en diferentes tipos de entidades
juveniles han empezado a poblar botellas de agua vacías (como las de la imagen
más arriba). Desde la distancia, no se distingue si el envase está lleno o no,
por lo que los estudiantes al cogerlo se dan cuenta del error. Al observar el
botellín, la persona se da cuenta del motivo. «¿Una botella de agua vacía es
todo tu almuerzo? Cuando no comes NADA dejas de SER tu», es el lema de la
iniciativa y el mensaje que aparece inscrito en los envases. Además, también se
reflejan datos sobre la enfermedad y la página web y el teléfono de ACAB.
Un vídeo distribuido por las redes sociales en las que
aparecen recogidos comentarios de personas que han visto de cerca la enfermedad
en los afectados pretende concienciar a través de uno de los canales que más
utilizan las nuevas generaciones. Finalmente, y con ayuda de profesionales y
referentes de diferentes ámbitos como el deporte o la música, se ha creado una
etiqueta el twitter denominada #ResSer, con la que se quiere difundir
información y mensajes sobre los trastornos de conducta alimentaria y ampliar
la concienciación.
La Razon
Centro terapéutico Valle del Tiétar