22 dic 2016

El 74% de los madrileños de 14 a 18 años bebe alcohol y el 27% se da 'atracones' mensuales




El 74,1 por ciento de los jóvenes madrileños de entre 14 y 18 años consume alcohol, mientras que en el conjunto de España se sitúa en el 78,9 por ciento, según la última Encuesta sobre Uso de Drogas en Estudiantes de Enseñanza Secundaria en España (ESTUDES) que en la Comunidad de Madrid coordina la Dirección General de Salud Pública de la Consejería de Sanidad.

Los profesionales de la salud llaman la atención ante el consumo a modo de 'atracón etílico' practicado mensualmente por uno de cada cuatro menores madrileños encuestados (26,7%) y muy vinculado a la práctica del botellón (lo hace el 19,7% de los entrevistados). Los 'atracones de alcohol' o 'binge drinking' como se conoce técnicamente, se refieren a la ingesta de cinco copas o más en un intervalo de dos horas.



Por todo ello, la Consejería de Sanidad insiste en estas fechas navideñas, en las que aumentan las salidas de los jóvenes así como el consumo del alcohol, en los riesgos que la ingesta de bebidas alcohólicas puede provocar, especialmente en los menores y jóvenes.

En este sentido, destacan los posibles daños derivados de su consumo en grandes cantidades en pocas horas, pudiendo ocasionar pérdidas de memoria a corto plazo, daño hepático, problemas cardiovasculares y cuadros muy graves de coma etílico, irreversible en no pocos casos.

Los expertos recuerdan la vulnerabilidad de los menores ante el alcohol tanto física como psicológicamente: su cuerpo no está preparado para metabolizarlo, tardan en percibir sus efectos y carecen de "percepción de riesgo" de esta sustancia para poder parar a tiempo. Además, insisten en que es una droga y, como tal, causa adicción.

Sanidad apela también a la responsabilidad de la población en general ante el consumo de alcohol y el volante, recordando que una persona que conduce bajos los efectos del alcohol pone en riesgo su vida y también la de otros ciudadanos. Aconseja, por tanto, como medida de elemental prudencia, asignar en las salidas festivas un "conductor abstemio".

NAVIDAD SALUDABLE CON EL BÚS 'DROGAS O TÚ'

Coincidiendo con la finalización de las clases del curso académico de este trimestre, el Servicio Itinerante de Prevención de las Adicciones de la Consejería de Sanidad, el autobús 'Drogas o Tú', que coordina la Dirección General de Salud Pública, participa mañana jueves en la Fiesta Sin Alcohol de estudiantes, que se celebra en el centro del municipio de Aranjuez (Plaza de la Constitución) y que prevé reunir a más de 250 jóvenes.

Además, el bus 'Drogas o Tú' acudirá estas navidades a puntos de ocio juvenil de siete municipios (Pozuelo, Móstoles, Getafe, Coslada, Las Rozas, Alcalá y Aranjuez), así como a tres distritos de Madrid (Moncloa, Vicálvaro y Puente de Vallecas) para ofrecer de manera lúdica consejos de prevención en el consumo de alcohol y otras drogas, informar sobre los efectos nocivos y, en definitiva, fomentar entre los jóvenes actividades saludables alternativas.

El Servicio está atendido por profesionales expertos en adicciones (como psicólogos y educadores sociales) y acude los 365 días del año a múltiples poblaciones de la Comunidad.

Desde su puesta en marcha, en mayo de 2010, cerca de 300.000 personas han visitado el autobús 'Drogas o Tú', que forma parte de las iniciativas en prevención de la Consejería de Sanidad, con estrategias para la prevención de las adicciones relacionadas con sustancias (drogas legales e ilegales) entre los jóvenes.


Fuente: Gente en Madrid 

16 dic 2016

El consumo de fentanilo, el fuerte calmante opioide que mató a Prince, sube un 248% en España


Decenas de muertes al día asociadas a opioides, los calmantes más fuertes que se recetan, han encendido todas las alarmas en Estados Unidos, cuyas autoridades —con el presidente Barack Obama a la cabeza— intentan combatir a marchas forzadas una situación que se les ha desbordado. La llamada "crisis de los painkillers" ha cruzado también la frontera norte del país y ahora la administración canadiense intenta contener la sangría causada por el consumo abusivo de un fármaco en concreto, el fentanilo, que inunda su mercado negro con lotes ilegales procedentes de China. ¿Y en España? ¿Se consumen medicamentos opioides (opiáceos sintéticos)? ¿Se vende el fentanilo? ¿Puede ocurrir una epidemia semejante a la norteamericana? El fentanilo es un fármaco que se emplea para calmar el dolor y que tiene una potencia 50 veces superior a la heroína. Por encima de todas las alertas sanitarias norteamericanas recientes, lo que ha hecho al fentanilo mundialmente conocido es la autopsia que reveló que este medicamento causó la muerte por sobredosis del cantante Prince, el pasado 21 de abril.

Sube el consumo del opioide más potente un 248%


 El Ministerio de Sanidad español no facilita información oficial sobre la evolución de la prescripción de opioides en el sistema de salud nacional y remite como último dato público al correspondiente al año 2006. A partir de ahí, nada. Diez años en negro. Sin embargo, la Agencia Española del Medicamento, dependiente del Ministerio de Sanidad, proporciona anualmente este dato a la Organización Mundial de la Salud, una información a la que ha tenido acceso 20minutos por vías alternativas a la oficial, y que revela que el consumo mediante prescripción médica del fentanilo en España se ha triplicado entre 2004 y 2014, pasando de 0,65 miligramos per cápita a 2,20 miligramos. Este incremento, de un 248%, coloca a España en el 5º país del  mundo con mayor volumen de consumo per cápita de este potente analgésico, de un total de 134 que aportan este dato. Solo superan a España en consumo nacional Alemania, Canadá, Austria y Bélgica


Varios informes alertan de su poder adictivo




Todavía mayor ha sido el incremento en la dispensación de otro potentísimo opioide, la oxicodona, analgésico cuyo abuso ha causado también miles de muertes en EE UU. En su caso, la dosis per cápita española ha saltado, entre 2004 y 2014, de los 0,46 miligramos a 13 miligramos per capita. Esta dosis sí es, sin embargo, inferior a la de los países de la UE, con Reino Unido a la cabeza en 91 miligramos, y mucho menor que la de Canadá, con 84, y EE UU, con 194 miligramos. (Ver mapa). Cecilio Álamo, catedrático en farmacología de la Universidad de Alcalá y experto en opiodes, defiende que "empleados adecuadamente, con su correspondiente control de receta específica, como lo hacen la mayoría de los profesionales españoles, son de una ayuda inestimable para los pacientes con dolor". Al tanto de los incrementos exponenciales de su uso en España, Álamo considera que no hay motivo de alarma, porque España partía de un uso marginal de ambas sustancias. Los opioides se recetan a pacientes que sufren un dolor que no calma la analgesia del ibuprofeno y similares. Existen dos categorías de opioides, suaves y fuertes. Entre los suaves, el más popularizado en España es el Tramadol. Entre los fuertes, el fentanilo, la oxicodona y la morfina. El doctor Álamo explica que en España "el dolor es un problema de salud pública, que sufre un 20% de la población" y que puede llegar a ser "una enfermedad grave", dado que en uno de cada tres casos "deriva en depresión".

Varios informes alertan de su poder adictivo El 'boom' de los nuevos opioides en España arranca en el año 2000, debido a la aparición en el mercado farmacéutico del fentanilo en parches transdérmicos, un formato que se ha impuesto a la morfina y que, por su mayor facilidad de aplicación (en parches o piruletas) ha extendido su utilización médica fuera del marco del paciente oncológico y paliativo, a un porcentaje cada vez mayor de enfermos de dolor crónico y agudo. Pero no todos los especialistas ven con buenos ojos la enorme expansión de estos opioides. 


Dos estudios recientes encargados por los sistemas sanitarios catalán (PDF) y navarro (PDF) alertan de que no funcionan adecuadamente en todos los pacientes reduciendo el dolor y de los gravísimos efectos secundarios. Ambos trabajos científicos se muestran muy críticos con la "selección" del medicamentos, "la dosis" y, sobre todo, de "la duración de los tratamientos". El departamento de Salud de la Generalitat critica su eficacia en el dolor crónico, además de subrayar "las complicaciones ya conocidas en relación a la adicción, la sobredosis y las intoxicaciones". Para concluir que la selección actual de opioides (fentanilo y oxicodona) no es la más adecuada, "las dosis que se utilizan son demasiado altas y la duración de los tratamientos demasiado largos".



 El informe del gobierno navarro también desaconseja su uso por carecer de datos a largo plazo "de eficacia y seguridad" y por su riesgo adictivo. El catedrático Álamo reconce falta formación entre los profesionales sanitarios y pide mayor vigilancia del inicipiente abuso "en pacientes con dolores agudos que por su adicción mantienen en consulta que sufren dolor para conseguir recetas" y por "el desvío posible de opioides de un paciente recetado a personas de su entorno".

España controla que no haya  mercado negro del fármaco

El director del Plan Nacional contra las Drogas del Ministerio de Sanidad, Francisco de Asís Babín, lamenta no disponer de estadísticas actualizadas de consumo de opioides con receta, aunque las conoce. Babín está al tanto de la pronunciada curva ascendente de las prescripciones médicas, pero asegura tajante que "afortunadamente nuestra situación es radicalmente distinta a la que está ocurriendo en EE UU". En su opinión, el hecho de que el sistema de salud pública española tenga una cobertura prácticamente universal impide un crecimiento incontrolado de estas sustancias. "Que sí se da en EE UU por la medicina privada, que necesita fidelizar y es mucho más proclive a dispensar a demanda del cliente". Vigilamos los medicamentos que se prescriben tanto como las alternativas del mercado negro y no vemos motivo de alarma En EE UU, sin embargo, el reciente cierre del grifo a la dispensación médica generalizada de oxicodona y fentanilo, ha expulsado a los adictos al mercado negro, llevando a muchos pacientes a consumir no solo opioides de manera ilegal, sino relanzando el consumo de metadona e incluso heroína. "No es que no debamos estar atentos en España", dice Babín, "pero no veo motivos de alarma porque aquí no ha aumentado en absoluto el consumo de heroína y nuestras estadísticas son claras". Sobre si puede ser cuestión de tiempo, el director del plan nacional contra las drogas rechaza pronunciarse, pero insiste en el mensaje tranquilizador. "Nosotros vigilamos los medicamentos que se prescriben tanto como las alternativas del mercado negro y no vemos motivo de alarma. Pero mantenemos alta la guardia, a ver qué ocurre, que nadie está exento de que se pueda mal usar un producto que es médicamente bueno". A la agencia antidroga de Sanidad, más que el abuso de opioides, lo que empieza a preocuparle es el uso no controlado de otro medicamento, las benzodiacepinas (hipnosedantes para trastornos del sueño, la ansiedad e incluso la depresión). La agencia que dirige Babín vigila de cerca un tipo de consumo concreto, el que protagonizan los jóvenes españoles que emplean estos psicofármacos para bajar su nivel de estimulación después de haber consumido otras drogas, como la cocaína o el MDMA". Este policonsumo tendrá por primera vez un apéndice en la próxima encuesta de drogas EDADES del Ministerio de Sanidad, cuyos datos se conocerán próximamente.


Fuente: 20 minutos

12 dic 2016

Más del 80% de los test de drogas da positivo en Almería



El consumo de drogas al volante se ha disparado en España y cada vez tiene mayor peso como causa principal de los accidentes mortales de tráfico. La imagen de un conductor pasando un control de drogas es ya habitual en las carreteras. Si antes algunos de los conductores que optaban por coger el coche durante el fin de semana, sólo vigilaban de cerca la cantidad de alcohol que tomaban por miedo a los controles de alcoholemia, desde 2010 los imprudentes al volante pueden vérselas con los llamados 'test de drogas». Y es que al igual que ocurre en el conjunto de España, en las carreteras almerienses muchos conductores llevan esos días un 'acompañante' invisible pero potencialmente letal: los estupefacientes.


Paradójicamente, el consumo de alcohol ha descendido paulatinamente entre los conductores. Esta realidad se debe principalmente una «mayor concienciación» entre los conductores y el constante trabajo que lleva a cabo la Dirección General de Tráfico (DGT) a través de las campañas informativas sobre los riesgos que conlleva mezclar las bebidas alcohólicas con el volante.
Sin embargo, el consumo de estupefacientes entre los conductores se ha extendido entre las carreteras de la provincia y en el conjunto del país, pese a las campañas informativas que también se han llevado a cabo en este ámbito.
«Pruebas en cualquier carretera y a cualquier hora», ese es el lema que persigue la DGT
Las cifras hablan por sí solas. Según los datos facilitados por la Jefatura Provincial de Tráfico a este periódico, más de la mitad de los test de drogas que los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil han practicado en territorio almeriense a lo largo de este año han dado positivo.
En concreto, en lo que va de 2016 los agentes de la Agrupación de la Benemérita, apoyados por agentes municipales de las principales localidades de la provincia, han practicado en la red de carreteras de Almería un total de 78 pruebas de drogas, de las que 65 han sido positivos, lo que supone el 83,3% del total.
Se trata de unas cifras «muy preocupantes», indican desde la DGT. Máxime al observar que los positivos han crecido más de un 40% respecto las pruebas realizadas a lo largo del pasado año, cuando los positivos alcanzaron el 50,70% a lo largo de las cuatro campañas contra el consumo de drogas que fueron coordinadas en territorio almeriense.
Según los datos facilitados por Tráfico, la inmensa mayoría los conductores que dieron positivo por estupefaciente habían consumido previamente cannabis y cocaína antes de ponerse al volante. Unas sustancias que casi siempre vienen acompañadas por el consumo de alcohol.
Y a pesar de que el número de pruebas antidroga no alcanzaron el centenar durante el pasado, cabe destacar que estos test se realizaron de manera «aleatoria, a distintas horas y carreteras», lo que pone de manifiesto que el consumo de sustancias estupefacientes entre conductores «es muy elevado», indican desde el organismo que vela por la seguridad del tráfico.
Cabe recordar que la DGT ha decidido incrementar de forma exponencial en los dos últimos años los controles sobre el consumo estupefacientes. «Pruebas en cualquier carretera y a cualquier hora». Ese es el lema que persigue Tráfico a tenor de los resultados tan preocupantes que han arrojado este tipo de test desde que se pusieron en funcionamiento.

Nueva campaña

Por este motivo, la DGT llevará a cabo durante esta semana una nueva campaña contra el consumo de drogas y alcohol. Tráfico ha hecho coincidir este dispositivo, que se extenderá hasta el próximo domingo, con las celebraciones navideñas.
Restaurantes con todas las reservas agotadas. Esta es la estampa que presenta Almería en las semanas previas a la celebración de la Navidad. Y es que la mayoría de las empresas de la provincia convocan a sus trabajadores para celebrar comidas y cenas con motivo de estas fechas. En estas reuniones, que generalmente implican coger el coche, provocan que el consumo de alcohol aumente entre la población.
Durante una semana, la Guardia Civil de la provincia intensificará los controles sobre este factor de riesgo de accidente, estableciendo controles por toda la geografía almeriense, y «no sólo estarán por la noche, sino también en horarios cercanos a la finalización de las comidas», informan desde la DGT. Asimismo, como en campañas anteriores, varios ayuntamientos de la provincia van a colaborar en la campaña, montando controles de alcoholemia en los cascos urbanos de sus respectivas localidades. Los agentes municipales también podrán practicar test de drogas, ya que han sido formados por la Jefatura Provincial para que puedan realizar estas pruebas en casco urbano, una de las localizaciones que más ha reforzado Tráfico para combatir el consumo de estupefacientes al volante.


Penas de prisión

La aparición de las pruebas de estupefacientes en las carreteras de la provincia ha supuesto «un antes y un después», indican desde Tráfico. Hasta hace un par de años, las drogas eran los «acompañantes» invisibles de los conductores pero mucho «más letales» para la seguridad del conductor y de sus acompañantes.
Cabe recordar que la reforma de la Ley de Tráfico y Seguridad Vial, aprobada el pasado año, contempla que conducir bajo la influencia de las drogas puede acarrear condenas judiciales de entre tres y seis meses de prisión o multa de seis a doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad de 30 a 90 días, y privación del derecho a conducir por un periodo situado entre uno hasta cuatro años.
Mientras que los que conduzcan tras haber bebido alcohol y presenten tasas superiores a 0,60 mg/l en aire o 1,2 gr/l en sangre, se enfrentan a penas de cárcel de tres a seis meses o multa de seis a doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad de 30 a 90 días, y privación del derecho a conducir de uno hasta cuatro años.
Tal y como se observa en el último Anuario del Ministerio de Interior, relativo al 2015, la Agrupación de Tráfico de la Benemérita almeriense detuvo o investigó ese año a 479 conductores por delitos relacionados con la Seguridad del Tráfico, de los que el 54% fueron por circular bajo los efectos del alcohol o las drogas.

Y el 43,1% de los conductores fallecidos en accidente de tráfico durante el pasado año circulaban bajo los efectos de drogas, alcohol o psicofármacos, según recoge la memoria sobre víctimas mortales en accidentes de tráfico de 2015, elaborada por el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses. Un informe que pone de manifiesto la peligrosidad de este consumo.

Fuente:  Ideal

5 dic 2016

Los españoles gastan más en drogas ilegales que en alcohol: 6.000 millones de euros


Los españoles llegamos a gastar más 6.000 millones de euros en drogas ilegales como marihuana, opio cocaína y derivados; lo cual es el 1% del gasto en consumo de los hogares. Eso supone un consumo mayor que el de bebidas alcohólicas.

Carlos es camello y lleva 20 años vendiendo todo tipo de drogas. "Vendo de todo, todo lo que me piden: cocaína, éxtasis, burundanga, heroína también se está llevando ahora..."

Entre sus clientes: "Piden las personas que menos te esperas, gentes trajeados con sus maletines, banqueros, empresarios... Cada vez va a peor".

El Instituto Nacional de Estadística, lo confirma: los españoles gastamos más de 6.000 millones de euros anuales en drogas ilegales. Es más de lo que nos dejamos en bebidas alcohólicas.


"España tiene unas tasas de consumo ligeramente superior a otros países pero las drogas ilegales son más baratas que las legales", comenta Fernando Caudevilla, Médico de Energy Control.

Carlos reconoce que la cocaína es la droga más demandada, también por los jóvenes: "La reina de la droga es la cocaína, es la droga de los ricos. Un cliente mío se ha gastado entre 7.000 euros y 9.000 euros".

María tiene 24 años y consume cocaína desde los 17. Lo hace los fines de semana, cuando sale con los amigos. Gasta 300 euros al mes. "Consumo los fines de semana, lo asocio más a salir de fiesta. Es el único vicio que tengo, no me supone quitarme de muchas cosas gastarme 300 euros en esto"


Cifras que reflejan una realidad que sitúa a España entre los países que más consumen: aquí se vende entre el 20 y el 25% del mercado europeo de narcóticos ilegales.

Fuente: Atresmedia