Recopilado de agencias por MIGUEL ÁNGEL LÓPEZ, Director del CENTRO TERAPÉUTICO VALLE DEL TIÉTAR – Pelayos de la Presa – Madrid – ESPAÑA
La magistrada titular del Juzgado de Menores de Burgos, Blanca Subiñas, atribuyó ayer la creciente violencia de hijos menores contra sus progenitores a un fallo en la educación que, en ocasiones, se agrava por el consumo de las 'mal llamadas drogas blandas', entre las que ha destacado el hachís.
La educación sólo en derechos y no tanto en obligaciones para con ellos, es una de las causas que la magistrada encuentra en un problema que se está agravando en los últimos años y para el cual considera necesario una reflexión y una regulación 'más precisa'. Subiñas, también decana de los jueces en Burgos, es partidaria de delimitar los criterios para distinguir entre qué casos es necesaria la tutela de los menores -desde su protección y los servicios sociales-, y cuáles deben llegar realmente al Juzgado de Menores, que 'no deja de ser un juzgado penal'.
En España, desde 2007, más de 17.000 menores de más de 14 años han sido procesados por agredir, física o psíquicamente, a sus progenitores durante la convivencia. Subiñas reconoce que son casos muy complejos, en los que en ocasiones es necesario que el menor cambie de ambiente y separarle de la familia 'para que ambos se den cuenta de lo que pueden perder', antes de retomar gradualmente las visitas hasta que se pueda decidir la vuelta a casa.
ETAPA MUY CONFLICTIVA
La magistrada recuerda que la adolescencia siempre ha sido una época conflictiva en que los adolescentes pueden mostrarse agresivos con sus padres, aunque en su opinión este tipo de situaciones se pueden haber agravado porque en los últimos años se está educando a los niños 'en derechos y olvidando que ellos también tienen obligaciones'.
Miguel Ángel López - CTVTiétar - Pelayos de la Presa – Madrid - ESPAÑA
