11 jul 2012

Tráfico pone en marcha los nuevos controles de drogas e intensifica los de alcohol en las carreteras españolas

Recopilado de agencias por MIGUEL ÁNGEL LÓPEZ, Director del CENTRO TERAPÉUTICO VALLE DEL TIÉTAR – Pelayos de la Presa – Madrid – ESPAÑA Centro de iniciativa privada para el tratamiento de todo tipo de adicciones y problemas psicológicos
La Directora General de Tráfico, María Seguí, ha afirmado que «unas 500 muertes se podrían haber evitado si no se hubiera consumido droga» y alerta de que «cocaína y cannabis son las drogas más habituales», durante la puesta en marcha de la nueva campaña de intensificación de controles preventivos a conductores con el fin de detectar a aquellos que conduzcan bajo los efectos de las drogas o alcohol, que se extenderá hasta el próximo 15 de julio.
Momentos antes de dar comienzo el primer control preventivo en un zona cercana a la Cañada Real Galiana de Madrid, un conductor que conducía presuntamente bajo los efectos de las drogas ha atropellado la motocicleta de uno de los agentes que participaban en la operación.
«He visto venir el coche hacia mí y sólo me ha dado tiempo a saltar, si hubiera estado despistado seguramente ahora no estaría aquí hablando», ha asegurado el agente que se ha visto involucrado en el accidente.

La Directora General de Tráfico, María Seguí, ha asegurado que el accidente «sólo ha sido una casualidad del momento» y ha recalcado que con el consumo de drogas al volante, «tolerancia cero».
Con la campaña que la Dirección General de Tráfico (DGT) ha puesto en marcha, se inicia la estrategia de «tolerancia cero» con la que el Ministerio de Interior pretende reducir el número de conductores que consumen drogas y se ponen al volante.

Más controlesHasta ahora, la DGT había practicado algunos controles de drogas a los conductores como parte de un estudio europeo para determinar la proporción de conductores que consumen bajo los efectos de sustancias psicoactivas en los países de la Unión. Sin embargo, este tipo de pruebas no se realizaba de manera general, como ocurre en el caso del alcohol, debido en parte a lo costoso de la prueba (unos 60 céntimos, el test más barato). Ahora, la intención de Tráfico es realizar los controles de drogas de «una manera mucho más exhaustiva y frecuente» con el objetivo de concienciar a los conductores de que conducir tras el consumo de drogas no sólo afecta a las capacidades del conductor sino que incrementa entre dos y siete veces la probabilidad de provocar o sufrir un accidente respecto a quienes no consumen ninguna sustancia, según explicó a mediados de junio la directora de Tráfico, María Seguí, en la presentación de la nueva estrategia.
Para ello, la DGT contará con un presupuesto para este año de un millón de euros, la mayor partida de los nuevos proyectos de la DGT este 2012.

España es uno de los primeros consumidores de cocaína y de cannabis del mundo con el 4 por ciento y 10 por ciento respectivamente de prevalencia de consumo entre la población en general. Según los datos que baraja la DGT, obtenidos mediante controles aleatorios, el 19,4 por ciento de los conductores circulaban tras haber consumido alguna droga. Además, en los últimos años ha crecido el número de víctimas mortales en accidentes que han dado positivo a alguna sustancia psicoactiva cuando se les ha realizado una prueba forense.

Por la vía penalSsi los agentes que realizan la prueba de consumo de drogas al volante determinan que el conductor presenta una «sintomatología evidenteØ de conducir drogado, podrá ser sancionado por la vía Código Penal. Para ello, los agentes valorarán el estado en que se encuentra el conductor de acuerdo a un protocolo de diez variables.
Es decir, a diferencia de lo que ocurre con las pruebas de alcoholemia, que al superar un determinado tasa de alcoholemia —0,60 mgr/l aire espirado— el conductor va directamente por la vía penal, en este caso serán los agentes los que determinarán si el conductor debe recibir una sanción administrativa o ser llevado ante un juez.
El Código Penal, en su artículo 379.2, establece para el delito de conducir drogado penas de prisión de tres a seis meses o multa de seis a doce meses o bien la de trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días y en cualquier caso con la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a un año y hasta cuatro años.

Miguel Ángel López - CTVTiétar - Pelayos de la Presa – Madrid - ESPAÑA